BARRY GONZALEZ ES UN GORDO. ES UN ADICTO INCONTROLABLE. PARA EL, Y LO DIJO TEXTUAL: "LA COMIDA ES SAGRADA". PARA UN GORDO, EL ALIMENTO NO SOLO SE USA PARA NO TENER HAMBRE, SINO QUE ES EL ELEMENTO QUE LE DA FELICIDAD A LOS DIAS, EL REFUGIO IDEAL, EL AMIGO QUE SABE ESCUCHAR. LOS QUE SOMOS O HEMOS SIDO GORDOS SABEMOS QUE NOS HALLAMOS EN UN MUNDO DE BURLAS, DE MODAS EN LAS QUE NO CABEMOS, DE DISCRIMINACIONES USUALES. BARRY CONOCE BIEN ESTE CAMINO, CASI TAN BIEN COMO SAMUEL PARRA.
Intentando evadir un poco las lecturas habituales que por lo menos desde el comienzo de este 2017 me ha llevado desde la novela histórica, aventuras, novela negra, fantasía, terror e incluso intriga psicológica, me he topado con una novela cuya tapa frontal me ha atrapado, me ha mirado a los ojos y me ha retado a leer, por lo que me ha sido imposible resistirme. Y es que la edición de EN LA PIEL DE UN ADICTO cuenta con la excelente fotografía de portada de ALEJANDRA ROJAS que sin duda logra capturar la esencia del libro y aunque es obvio que no debemos juzgar a un libro por su cubierta, sin duda la inquietante fotografía del frente del libro en realidad que invita a leer.
Pero bueno, dejando de lado el exterior y avocándonos a lo importante es decir, la sustancia de la obra, debo comentar que el libro me ha gustado mucho aunque creo que me pudo haber gustado más... me explico.
Comencemos diciendo que la novela es en gran medida autobiográfica, por lo que en el protagonista BARRY GONZÁLEZ, podremos conocer bastante de la vida del autor SAMUEL PARRA. No es fácil discernir donde termina la realidad y donde inicia la ficción, sin embargo intuyo que desde el momento en que el escritor se ha inclinado por dar a su relato el formato de novela mas que el de crónica autobiográfica, esos detalles quedan en un segundo plano, ya que en EN LA PIEL DE UN ADICTO se prioriza el mensaje sobre la rigurosidad biográfica.
La novela da inicio con una especie de epilogo de un misterioso personaje sobre el cual sabremos muy poco incluso después de haber concluido la lectura, pero que tuvo la fortuna o desdicha de haber conocido a BARRY el gordo. A través de su voz, el lector descubrirá las vivencias de BARRY dentro y fuera de la clínica MEJORÍA, prisión o refugio, que habría erigirse como el ultimo bastión, que pudiera salvarle del camino de autodestrucción que constituye toda adicción.
Y es que el gran acierto de EN LA PIEL DE UN ADICTO es la contundencia con que hace al lector a mirarse al espejo, porque, para ser honestos todos somos adictos a algo. Al trabajo, al internet, al ejercicio, al alcohol, a alguna droga, a las compras, al tabaco, al sexo, al juego, incluso a las personas y relaciones nocivas; por esto es que es muy difícil no sentir empatía por el buen BARRY, ya que mas allá de su adicción a la comida, su situación es verdaderamente universal. «Es molesto e irritante leer el libro y que a pesar de ser bastante sucinto en su contenido -quizá la mayor pega al libro sea su brevedad, poco mas de 100 páginas- te obligue a mirar tu interior y descubrir que lo que ahí ves, no es del todo agradable».
De lectura amena, con capítulos cortos -algunos de ellos de un párrafo- el lector acompañará a BARRY, en una búsqueda donde deberá encontrar la auto aceptación y aprender a desprenderse de esa máscara de pedantería y suficiencia que le impide dejarse ayudar. «Y es que ¿A quien demonios le gusta que nos señalen, critiquen y juzguen por nuestras debilidades?.. por esto, es preferible mostrar fortaleza, disfrazar la desesperación y angustia de alegría y complacencia».
En cuanto al estilo de SAMUEL PARRA, podemos decir que es bastante congruente con su personalidad -ya que el autor es un tipo relajado, de risa fácil y un tanto cínico que gusta de reírse de si mismo-, que se lee ágilmente y muy ameno; de lenguaje directo y sin florituras y que consigue que EN LA PIEL DE UN ADICTO, sea una narración emotiva e irónicamente cargada de humor.
Es poco más lo que se puede agregar sobre el libro EN LA PIEL DE UN ADICTO sin revelar la esencia del argumento. Baste son decir que es una novela sincera, sobre un personaje de gran realismo, en muchos aspectos hasta ordinario y que ni es el mas listo, ni el mas valiente, ni el mas fuerte del grupo de personajes de entre el variopinto grupo de internos de la clínica MEJORÍA, pero que sin duda arrebatará la empatía del lector desde las primeras paginas.
Me ha gustado mucho leer EN LA PIEL DE UN ADICTO. Una novela que en pocas palabras cuenta mucho y que con pocos trazos consigue dotar de profundidad a unos personajes rotos cuyas vidas deberán ser reconstruidas por la imaginación del lector en una lectura entretenida y reflexiva. La he pasado en ocasiones muy mal con este libro -que en literatura, pasarla mal con un libro es en realidad pasarla bien-.
LO QUE ME HA GUSTADO MÁS: El tono de la narración y el manejo sutil de los constantes y subrepticios cambios de humor de BARRY -y es que la desintoxicación de las adicciones no discrimina entre sustancias o malos hábitos.
LO QUE ME HA GUSTADO MENOS: Me habría gustado que SAMUEL PARRA se ahondara mas en la vida de algunos personajes que creo habrían enriquecido la novela, sin embargo, ¿Quién sabe si el autor se esta reservando un par de ases en la manga para futuros trabajos?
Muy recomendable lectura, le dejamos 4 Estrellitas de 5.5 para esta buena novela.
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