EL LEÓN DE CARTAGO NOS SUMERGE EN LA CULTURA CARTAGINESA, ROMANA Y DE LOS
PUEBLOS HISPANOS PRERROMANOS, EN UN MARCO APASIONANTE DE AVENTURAS, AMOR E
INTRIGA. SUS PÁGINAS RELATAN LA VIDA DE AMÍLCAR, EL PADRE DEL GRAN ANÍBAL, Y LA
NIÑEZ DE ÉSTE. A TRAVÉS DE UNA HISTORIA ÁGIL, ENTRETENIDA Y LLENA DE PASIÓN,
CONOCEREMOS LAS CONSPIRACIONES EN EL SENADO CARTAGINÉS, LA DUREZA IMPLACABLE DE
ROMA Y LA VIDA EN LA SUNTUOSA, MODERNA Y FINANCIERA CARTAGO. TAMBIÉN NOS
EMBARCAREMOS EN LAS AVENTURAS CARTAGINESAS POR LA ESPAÑA PRERROMANA EN BUSCA DE
PLATA Y DESCUBRIREMOS SUS ALIANZAS MILITARES EN EL MEDITERRÁNEO PARA TRATAR DE
DERROTAR A SUS ENEMIGOS. PASEAREMOS POR LAS CALLES DE UNA ROMA DE LADRILLO Y
MADERA, UN GRAN POBLADO LATINO, ORGULLOSO Y AUSTERO, HABITADO POR AGRICULTORES
GUERREROS A QUIENES LES CUESTA ASIMILAR QUE GRACIAS A SU EJÉRCITO LA REPÚBLICA
SE ESTÁ CONVIRTIENDO EN UN IMPERIO. Y RECORREREMOS LA ESPAÑA ANTIGUA VIVIENDO
AVENTURAS ENTRE LOS CELTAS, IBEROS Y CELTIBEROS QUE LA PUEBLAN, CONOCIENDO SUS
FASCINANTES COSTUMBRES Y TRADICIONES. UN VIAJE INOLVIDABLE POR UNO DE LOS
EPISODIOS MÁS EMOCIONANTES DE LA HISTORIA ANTIGUA EN EL MEDITERRÁNEO. ?
Roma es artífice de la cultura occidental, tanto así que en
nuestros días, aun conservamos muchas de las directrices sociales, políticas
e incluso militares (por no decir religiosas) que los romanos implementaran
desde hace mas de 2000 años.
Es bastante conocido que los romanos así como
lograron influencia universal y en bastante medida occidente es lo que es por
Roma; no debemos olvidar nunca la influencia que a su vez tuvo Roma de otras
culturas, principal mente la cultura griega.
Pero, cabe destacar, que Roma alcanzo su
esplendor cultural al haberse enriquecido de otras culturas mediterraneas e
incluso del norte de África.
Amilcar El León de Cartago, es una novela
histórica que evoca una época, en la que Roma ha logrado someter a la gran
potencia africana de Cartago, después de una Guerra (la famosa Primera Guerra
Púnica), desgastan te en todo sentido, costosa en vidas y en oro.
Amilcar como es conocido por todos, fue
un General del ejercito cartagines, reconocido y respetado en el mediterraneo
por sus altos logros militares y logísticos. Padre de Anibal, (personaje que
habría de superarlo en trascendencia histórica con el paso del tiempo), Lucho con ahinco en batallas en frente de
guerra como en el senado cartagines, buscando el apoyo para resistirse a las durísimas condiciones de indemnización de guerra impuesta por la república
romana, pero que el Senado nunca aprobó.
Luis de la Luna Valero, nos muestra un
mundo desconocido por muchos, una República Cartaginesa poderosa e
influyente, que bien podría competir en lo político y comercial con Roma,
lamentable mente en el aspecto militar nunca dio la medida.
Con una lectura ligera, pero plagada de
referencias bibliograficas, el autor nos entrega una historia bastante
interesante de las raíces que dieron gestión a la segunda guerra púnica
(Guerra narrada con mayor detalle en obras como la trilogía de Africanus de
Santiago Posteguillo, o Anibal de David Anthony Durham) y que ofrece al
lector la posibilidad de entender mejor a los protagonistas desde el interior
de su cultura.
Anibal, Asdrubal,
Maharbaal, Giscon y otros personajes que hicieron de ese pasaje histórico,
una excelente fuente de inspiracion donde escritores de novelas históricas o
ensayos de historiadores, se han
cebado con el paso de los años. Por el
lado romano, nos encontramos también con un Maduro Lucio Cornelio Escipion y
Publio Cornelio Escipion (Abuelo y padre de Africanus respectivamente)
aportando el punto de vista romano en la trama.
Una excelente historia, sobre una cultura
mas avanzada de lo que nos imaginamos.
Fue en Cartago donde se establecerían las
bases financieras y cotizacion (instituyeron unos de los primeros centros
cambiarios o de bolsa en el mundo) así como también se gestionaron las
primeras instituciones comerciales de regimen privado o sociedades anónimas
con fines de lucro. Los cartagineses
fueron los verdaderos precursores del uso de la crucifixión como modo de
tormento, uso que adoptarian después los mismos romanos. Esto y mucho mas podemos descubrir con la lectura de esta excelente novela.
De rápida lectura, descubrimos como
Cartago doblego en gran medida las tribus y clanes en Hispania, tanto celtas
como ibéricos no solo con el fin de apropiarse de las minas de plata y estaño para fabricar bronce, sino, con la pionera idea de a traves de las conqustas y alianzas crear por medio de la procreacion producto de las mezclas de sangre punica e iberica, una raza guerrera superior capaz de lograr la supremacia militar de la epoca; todo esto ante
la mirada de una Roma soberbia, que mientras recibiera la paga de
indemnización por la guerra desde
Cartago, hizo oidos sordos a las escaramuzas y conquistas peninsulares
por parte de Amilcar y su ejercito.
La misma península ibérica, incluyendo
Portugal y España, esta plagada de ciudades cuyos nombres ahora latinos,
fueron derivaciones del cartagines, adoptadas con el paso de los años durante
la romanizacion de Europa.
En fin, una novela histórica
excelentemente documentada, un retrato del antiguo Cartago, pero no del
Cartago de los historiadores Seneuco o Tito Livio, donde la cultura púnica
fue dibujada con tintes mas bien incivilizados y salvajismo sin sentido, sino
una Cartago, en apogeo económico, con inconmensurables puertos y muelles
comerciales, influencia financiera creciente, una identidad bastante
arraigada y orgullosa de su origen y su tierra.; una vision del mundo vista
desde el norte de África, desde donde se gesto una potencia que poco a poco
fue creciendo hasta el punto de a los ojos de Roma, una Roma mezquina,
ambiciosa y e implacablemente injusta (desde el punto de vista púnico) llego
a convertirse en una amenaza para la República.. el resto, es historia.
Excelente novela histórica, con un estilo
mucho mas narrativo que descriptivo, cuyos puntos debiles podrían ser la
demasiada rapidez con que se lee, lo poco que en ocasiones llega a
profundizar en temas tan interesantes y un poco falto de acción, ya que las
batallas son relatadas sin espectaculares detalles, novela que antepone la
erudición al entretenimiento.
Me habría encantado que el autor se
hubiera explayado mas en la relación de Cartago con las culturas Helénicas y
en particular, que el escarseo con Arquimides hubiera sido mas profundo, pues probablemente la historia habria dado para minimamente 500 paginas mas.
Me ha encantado leerla y le pongo 4/5
Estrellas, no es una obra maestra pero es muy buena.