LA LIBRERIA QUE NUNCA CIERRA

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jueves, 17 de septiembre de 2015

PEÑA AMAYA - PEDRO SANTAMARIA


Año 572. Después de sus exitosas campañas contra los bizantinos en el sur, el rey visigodo Leovigildo pretende unir bajo sus leyes toda Hispania y, para ello, deberá marchar con sus huestes hacia el norte. Allí se asientan el reino germánico de los suevos, las temibles tribus vasconas y, entre ambos, el estado embrionario d e los cántabros, que se mantiene independiente gracias a la inexpugnable ciudad de Amaya. Tomás, un monje cántabro que en otro tiempo fue guerrero, tendrá que enfrentarse a su pasado y a su hermano mayor, Necón, que será el encargado de defender Amaya, y con ella Cantabria, del rodillo visigodo.


PEDRO SANTAMARIA  es el autor de OKELA y EL AGUILA Y LA LAMBDA (ambas novelas ya reseñadas en este blog) y aunque por estas fechas esta por publicar una nueva obra, no quisiera dejar pasar la oportunidad de comentarles acerca de esta novela, PEÑA AMAYA, que se ha convertido al instante en el campeón del blog en lo que va del año.


Y es que es por lo general un tanto común, que tanto artistas como escritores, suelan convenientemente, considerar su mas reciente trabajo como el mejor a la fecha, con PEÑA AMAYA, sin saber cual sea la opinión del autor sobre su propia obra, es a mi gusto su mejor trabajo, y aquellos que hayan leído con avidez sus anteriores novelas, estoy seguro que apoyaran mi opinión.


PEÑA AMAYA lo tiene todo. Desde el magnifico diseño de su portada, que nos muestra a un guerrero armado  y listo para la guerra, mientras a lo lejos, en el horizonte, la inconquistable Peña Amaya, refugio y fortaleza de un pueblo valiente e indómito; mostrándose orgullosa en lo alto, soberbia y poderosa, pero amenazada por un cielo nublado y oscuro, siniestro. El mero hecho de ver la portada del libro invita a la lectura de inmediato.

Y para entrar en materia, como antecedente para ubicarnos en la época, digamos que la historia nos narra hechos ocurridos en los años posteriores a la caída de Roma y en que sus antiguos aliados, los Visigodos, al comprender que el otrora poderoso imperio romano agonizaba, se decidiera a unificar bajo su reinado toda Hispania. Pero a pesar del poderio que el rey godo, Leovigildo, se habría de topar con el mismo inconveniente que siglos antes, complicara al mismísimo Cesar Augusto en la instauración de su pax romana; y este era el pueblo cántabro.

Los cántabros eran un pueblo muy arraigado a su tierra, orgulloso y tradicionalista, levantisco y poco dado a hincar la rodilla ante nadie, valiente y beligerante, que no se humillaba ante ningún enemigo, pero sensato, puesto que en caso de necesidad, no dudaba en encerrarse tras la gran roca, y defenderse como un león herido. 

Con estos antecedentes, era logico que llegado el momento en que el rey de los visigodos posara sus ojos en Cantabria, se rehusaran a someterse ante el, por lo que cantabros y visigodos habrian de enfrentarse en un conflicto sangriento y brutal, en el que peña amaya, habria de jugar un papel fundamental.


La novela se lee ágilmente ya que además de poseer la cadencia que caracteriza la prosa del autor, el lector, a través de los personajes cántabros, conoceremos la desesperacion, el hambre y temor dentro de peña amaya; y al mismo tiempo gracias a la inclusión epistolar de las memorias de un militar godo, el lector, de primera mano, conocerá los pormenores, la logística y estrategia que el ejercito invasor, bajo el mano de Leovigildo, llevara a cabo para arrasar con Cantabria.

En cuanto a los personajes, estos están recreados con la maestría acostumbrada, poseen el carácter correcto y congruente para el papel que desempeñan en la trama, dotados todos ellos del realismo necesario para que el lector los encuentre entrañables.  Los diálogos son mas que notables, llenos de ingenio y fuerza. 

Me ha encantado PEÑA AMAYA, la historia en entretenida, la documentacion adecuada y los personajes memorables. La atmósfera de tensión, durante las batallas es brutal. Cabe destacar, que el papel del cristianismo juega fundamental en el devenir de la trama, ya que la fe es fundamental para unir o para dividir a los pueblos.

PEDRO SANTAMARIA se ha superado a si mismo. PEÑA AMAYA es sin duda su mejor novela, la mas emocionante y la mas dramática. 

Me ha encantado leerla, y le dejo 5/5.5 Estrellitas.